Anna tiene cinco años y un lunar cerca de la
naricita.
Tiene tanta musica como su nombre, ella nació con un
candombe.
Su cabellera parece lluvia de miel trenzada y a sus
carcajadas las esperé más de 20 años.
Es crítica y mucho más inteligente que yo, que
tengo 27 y soy su tía.
A Anna le gustan el “rosita” y los tambores del
tío Rami.
Un día soñó que la tía Maca bailaba candombe con
tambores y Minie.
Desde chiquita canta “Los únicos, los mejores, los
métodos piqueteros”
También entona con el puño en alto “Yo no soy sumisa”
Me dio
vergüenza que a sus 3 años cante “Ni puta, ni sumisa”
Pero esas son inhibiciones
mías, no de Anna.
Es mi pequeña activista con alitas de hada.
Todos los 24 de marzo de su vida los pasó en la Plaza de Mayo
Un día la encontré sola mirando la tele y pidiendo
“Paka, Paka para todos”
Suele pararse arriba de los escalones del patio y
decir convencida “Los niños tenemos derechos”
Aprendió a reciclar, deja papeles, cartones y
plásticos con su mamá y Lelé (la hermana pequeña) a la
cooperativa de cartoneros de la esquina de su casa.
Tiene todo el merchandancing bolivian que le trajeron
sus tíos de largos recorridos en mochilas y avión.
A Anna le gusta la Bambula
Anna es mi fideo.
Para navidad le pidió a su mamá, mi hermana, una
Barbie.
Mi hermana le contestó que no, que a ella no le
gusta Barbie
Anna, tosuda, le preguntó porqué
Mi hermana contestó “porque es una mujer que no
existe”
No conforme, se acercó a mi y me preguntó si me
gustaba Barbie.
Yo la miré con cara de -ya sabía que iba a llegar el
momento donde mi pequeña fideo fuera colonizada por la industria
patriarcal del juguete y me pidiera algo que yo no quisiera regalarle-
Anna lo intuyó y bajó la mirada con pestañas y
todo, aún así esperó la respuesta.
Enuncié mi determinante postura con respecto a las
Barbies, al modelo de mujer que promueven, al sistema patriarcal...
Fue un rotundo NO...
Anna levantó la mirada y muy calma me preguntó
“Tía Maca, cuando tenías 5, a vos, te gustaban
las Barbies?”
... ... ...
Mi sobrina es la pesadilla del Uva Sal
Yo lo dije, Anna con 5 años y su lunarcito es más
inteligente que yo.